La XVI Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno fue inaugurada este viernes en Montevideo en el Teatro Solís, el más antiguo de Sudamérica, con representantes de 22 países y la ausencia de ocho mandatarios.

"Bienvenidos a Uruguay. Gracias por haber llegado a este lejano suburbio de la lengua española", declaró el presidente uruguayo Tabaré Vázquez en la ceremonia de inauguración, al dar la bienvenida a los jefes de Estado y de Gobierno visitantes.

"En este país y en esta ciudad, sientan que están en su casa", dijo Vázquez, quien recordó en su discurso que muchos uruguayos son hijos de inmigrantes. "Nos une un pasado que no elegimos, pero cuyo legado asumimos. Nos une también la necesidad y la posibilidad de un futuro mejor. La única forma de realizarla adecuadamente es abordarla con pasión y voluntad", agregó Vázquez.

El uruguayo Enrique Iglesias destacó en el primer discurso del acto inaugural que tras haber estado un año al frente de la Secretaría General Iberoamericana, tiene en claro que "existe un espacio para la concertación política".

El secretario general de la ONU, Kofi Annan, destacó las grandes desafíos que persisten en el mundo moderno, y luego el rey Juan Carlos de España recordó que las migraciones --uno de los temas centrales de la cita de Montevideo-- es un fenómeno que "siempre ha acompañado al devenir de la humanidad y que se ha intensificado en nuestros días".

"Hoy nos disponemos a abordarlo serenamente (el tema de las migraciones), con la mirada puesta en el respeto de cada país", expresó el monarca. Tras agradecer la labor ejercida por Iglesias al frente de la Secretaría General Iberoamericana, el rey destacó que "sobre la base de su rica historia e identidad, nuestra comunidad se proyecta hacia los demás con dinamismo".

Luego de los discursos de Iglesias, Annan, el rey y Vázquez, los jefes de Estado y de Gobierno presenciaron un programa artístico y luego participarían en una cena oficial, las únicas actividades oficiales de la cumbre este viernes.

Iglesias destacó en su discurso que la migración, que es el tema central de la Cumbre, "es un componente esencial en el espacio iberoamericano" y que "migrar forma parte del proyecto de vida de las personas que desean progresar" y abogó "porque todos saquen provecho de las migraciones". Iglesias dijo asimismo, que "es posible construir una sociedad mejor, más justa y segura" y que el "gran reto" es construir sociedades integradas.

Instó a tener una "política de migración creíble" que "contribuya a preservar la dignidad de los seres humanos".