Semana Política. El consenso alcanzado el viernes en el Senado tuvo al ministro de Economía como protagonista clave. Sin él hubiera sido muy difícil una salida política

Por obra y gracia de Atchugarry

En esa ocasión la responsabilidad pudo más que el riesgo, y el Frente Amplio se sumó a votar ley de bancos

SERGIO BERRUTTI

Tras asumir su cargo en el momento más complicado de la crisis económica y bancaria para atravesar una tormenta cuyo final todavía no se vislumbra con claridad, el ministro de Economía Alejandro Atchugarry recogió esta semana un primer gran fruto de su paciente trabajo al lograr que todos los partidos, incluido el Frente Amplio, hubieran decidido apoyar el proyecto de ley sobre el sistema financiero impulsado por el gobierno y negociado en el Parlamento.

La contracción al trabajo y la capacidad de negociación del ministro de Economía fue el ingrediente fundamental para llegar a este acuerdo histórico del que participan todos los partidos políticos, en una demostración de que más allá de fisuras y choques naturales en un régimen democrático, existen reservas de sentido de responsabilidad para dejar de lado las chacras ideológicas o ventajear políticamente, y poner el hombro ante situaciones límites como las actuales.

En esta ocasión la responsabilidad también pudo más que el temor al riesgo, ya que como los senadores, también líderes políticos han señalado que la solución planteada es la "menos mala". Sin embargo, en el Senado los representantes tupamaros José Mujica y Eleuterio Fernández Huidobro y el herrerista Carlos Garat, no toleraron esa carga y se dejaron ganar por el temor al riesgo retirándose de sala y no votando.

Desde que Atchugarry asumió —pese a sus resistencias— el Ministerio de Economía, todos los partidos dieron crédito al nuevo ministro y, aunque el Partido Nacional no cumplió con el año de tregua que había proclamado públicamente, alejándose de la coalición de gobierno —una decisión que disgustó a Atchugarry—el ministro, pasando por alto ese hecho, así como las permanentes críticas de sectores de izquierda, se las ingenió para profundizar un nivel de comunicación político y un reconocimiento aún de sus más duros adversarios, que ahora recoge el fruto de un respaldo de todos los partidos a este proyecto, uno de los más importantes del gobierno

Claro que no se trata de un respaldo entusiasta, sino de una decisión que busca generar una oportunidad para que los ahorristas puedan seguir teniendo sus depósitos y los trabajadores bancarios —aunque en menor número— su fuente de trabajo.

Las últimas reuniones y conversaciones telefónicas de Atchugarry con el ex presidente Luis Alberto Lacalle y el líder del Frente Amplio, Tabaré Vázquez, así como los contactos permanentes con los legisladores de esas dos colectividades, generaron un espacio fecundo para llegar a ese acuerdo.

AGRADECIMIENTO. El viernes 13 en una reunión calificada como "muy importante" por los frenteamplistas, Atchugarry informó a los senadores designados por Vázquez para participar en ese encuentro —Danilo Astori, Alberto Couriel y Manuel Núñez—sobre los datos detallados respecto a la situación del sistema financiero.

El senador Couriel dijo tras ese encuentro que "con las reuniones que tuvimos con el ministro de Economía, creo que la fuerza política está en condiciones de poder definir su posición. Se aclararon algunos puntos de vista, la información fue muy exhaustiva por parte del ministro de Economía y quiero agradecer públicamente la actitud del ministro con respecto a ser lo más abierto posible en dar información, en dialogar, por eso siento que es una reunión extremadamente constructiva para nosotros y para el país", señaló Couriel en esa ocasión.

Fuentes frentistas advirtieron sin la presencia de Atchugarry y el estilo de conducción de este proceso que ha asumido, hubiera sido muy difícil que el Frente Amplio respaldara un proyecto de ley de esta naturaleza

El diputado de Alianza Progresista, Víctor Rossi dijo a El País que sin Atchugarry y con otro ministro como los "convencionales" que han estado en Economía, "el país estaría en una situación más grave, sin posibilidades de entendimientos como las hay actualmente".

En medios frentistas se ve a Atchugarry como "un encantador de serpientes", en cuya acción busca todas las maneras posibles de formular las soluciones, procurando no perder la esencia de lo que busca impulsar. "No es del estilo de que ésta es la única salida", comentó otro de los senadores de izquierda consultados.

Más allá de estar de acuerdo o no con su pensamiento, el ministro Atchugarry lo que sí ha cosechado es la unanimidad en el reconocimiento en cuanto al máximo grado de compromiso en encontrar soluciones a los problemas del país que se refleja en largas jornadas de trabajo, los fines de semana incluidos, lo que ha generado paradójicamente confianza, aún en medio de la aguda crisis que continúa azotando al Uruguay.

ARTICULACION. Ciertamente que la disposición que el Frente Amplio ha mostrado en acordar, no se le vio en otras ocasiones, aun cuando estuvo cerca en el caso de la asociación de Ancap con petroleras internacionales. Esta vez en la interna frentista Astori y Couriel impusieron su criterio y aunque sea a disgusto el resto de la bancada y el propio Vázquez no tuvieron otra salida que seguir sus posturas marcadas públicamente desde el arranque.

Seguramente tampoco esta ajena esta postura de la izquierda a la posición que ya hace cuatro meses en la Plaza Independencia sostuvo con toda claridad el presidente del sector banca privada de AEBU, Juan José Ramos, encabezando junto a los ahorristas el movimiento para la formación del nuevo banco.

Pero la articulación planteada por Atchugarry fue el instrumento clave. El viernes 20 durante la presentación del libro "La revolución imposible" del periodista Alfonso Lessa, el director de Ciencias Políticas de la Universidad de la República, Gerardo Caetano dijo que en Uruguay no se puede subestimar a la política para alcanzar logros importantes. Este consenso fue logrado por un ministro de Economía que no subestima la política, sino que hay una opinión generalizada que la prestigia actuando lealmente con sus aliados y sobre todo, con sus adversarios.

Dichos y hechos
El lunes 16 el secretario de la Presidencia de la República, Raúl Lago advirtió que "en un momento en que hay una fuerte discusión en el país sobre la despenalización del aborto y el tema del derecho a la vida", es bueno impulsar y ayudar al Ministerio de Salud Pública en difundir la existencia en el país de mecanismos de disposición gratuita de los métodos anticonceptivos, "que quiérase o no es un poco una contracara de lo otro".

El martes 18 la Asamblea General decidió postergar una definición sobre la renovación de la integración de los organismos de contralor —Corte Electoral y Tribunal de Cuentas— para el 15 de enero próximo, en el marco de un debate por momentos ásperos en que el senador del Frente Amplio José Korseniak acuso a los colorados y blancos a resistirse a concretar esa renovación, para reservarse el derecho a anular elecciones. Colorados y blancos rechazaron ese planteo y las amenazas del senador frentista.

El miércoles 18 el presidente Jorge Batlle hablo ante los empresarios en un almuerzo organizado por la Asociación de Dirigentes de Marketing en el que hizo un balance del año. El mandatario ratificó su compromiso de cumplir con las obligaciones ante los organismos internacionales, bajar el gasto público, impulsar las reformas estructurales del Estado e insertar a Uruguay en el mundo. El presidente dijo que este año "fue el más traumático que vivió Uruguay en los últimos cien años".

El jueves 20 senadores de todos los partidos políticos homenajearon al extinto ex vicepresidente Enrique Tarigo, a quien calificaron como el "abanderado de la lucha por la libertad" destacando su protagonismo central en favor del voto por el NO en el plebiscito de 1980.