JORNADA TRANQUILA | El peso argentino repuntó levemente; aumentaron las reservas; la Bolsa trepó y los peores temores no se cumplieron

Final feliz del "corralito" argentino

Observadores estiman que en un futuro cercano, se podrían levantar también las trabas que afectan a los plazos fijos

BUENOS AIRES | AFP

El "corralito" bancario sobre las cuentas corrientes quedó eliminado en Argentina, al cumplirse un año de las impopulares restricciones, sin desatar pánico cambiario ni huida de inversionistas hacia el dólar.

"El mercado reaccionó mejor de lo esperado. Hubo algo de confusión al comienzo, pero luego se notó que el que quería dólares los podía conseguir sin problemas y la plaza tendió a ser algo más normal", dijo un agente bancario.

En las calles de Buenos Aires se formaron largas filas de ahorristas en algunos bancos, previo a la apertura, a la espera de poder comprar dólares, pero la intervención del Banco Central frenó cualquier especulación, dijeron operadores.

El peso argentino se mantuvo estable en el mercado regulado por el Banco Central, y se apreció 0,9% en las casas de cambio, el día del levantamiento de las restricciones que pesaban sobre las cajas de ahorro y cuentas corrientes bancarias por unos 20.000 millones de pesos (5.600 millones de dólares al cambio actual).

"Lo que hoy se está liberando son fondos que faltan para que funcione la economía. Desde el punto de vista técnico, no debería haber ninguna razón para alterar ninguna de las variables. Creo que hubo mucho ruido la semana pasada, más ruido del que hubiera deseado", dijo el ministro de Economía, Roberto Lavagna, en declaraciones a radio América.

MAS RESERVAS. Las entidades financieras que operan por cuenta y orden de la autoridad monetaria ofrecieron el dólar a 3,55 pesos, el mismo valor que el viernes, en tanto que en los pequeños locales del centro porteño el billete verde cerró tres centavos más barato que el viernes pasado, a 3,63 pesos.

Lejos de perder reservas, el Banco Central ganó 20,1 millones de dólares en el mercado, como balance de las operaciones de compra y venta, mientras que el índice de la Bolsa repuntó con vigor 3,16%, a 513,53 puntos.

Medidas de solución al problema del bloqueo financiero habían sido reclamadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero no hubo el lunes comentarios de funcionarios del organismo, cuyas negociaciones con el gobierno del presidente Eduardo Duhalde se encuentran estancadas.

El único dinero indisponible del sistema y cuya devolución fue reprogramada a partir del 2003 es el de los plazos fijos, que representan unos 15.000 millones de pesos, propiedad de unos 400.000 ahorristas. Observadores estiman que la tranquilidad con que se vivió la jornada de ayer haría posible, en un futuro cercano, levantar también las restricciones que afectan a los plazos fijos.

DOLAR TRANQUILO. Los economistas Carlos Melconián, Orlando Ferreres y Aldo Abram, que suelen asesorar al FMI y ser muy escuchados en la plaza de finanzas, coincidieron en que no hay razones para que se produzca un alza del precio del dólar.

"La única posibilidad para que el dólar pegue un salto sería que se dispare la tasa de inflación", indicó Melconián, de la consultora MyS.

El "corralito", vocablo que se popularizó en Argentina a lo largo de todo el año, fue montado por el anterior gobierno de la Alianza (UCR-Frepaso) el 3 de diciembre de 2001, pero causó tanto malestar que precipitó la caída del presidente Fernando de la Rúa y del ministro de Economía, Domingo Cavallo, mentor ideológico del cepo bancario.

Ambos renunciaron el 20 de diciembre del año pasado en medio de una revuelta popular, saqueos y choques de manifestantes con la policía, cuyo saldo fue de 30 muertos.

Unos 12.000 millones de pesos del "corralito" están depositados en cuentas corrientes, que el sector privado usa como dinero transaccional para operar en la economía, en tanto que los restantes 8.000 millones están en las cajas de ahorro.

Con la nueva medida, los argentinos pueden disponer de la totalidad de su dinero en cuentas corrientes y cajas de ahorro, mientras que hasta el viernes pasado aún existía un límite de extracción en efectivo de 2.000 pesos (546 dólares) mensuales.

Agenda para revitalizar el Mercosur

BUENOS AIRES -El presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y el mandatario argentino, Eduardo Duhalde, acordaron ayer establecer un agenda para reconstruir al debilitado Mercosur y fijaron una reunión entre representantes de ambos países para enero en Brasilia.

Lula y Duhalde se reunieron durante 40 minutos en la residencia presidencial de Olivos, en Buenos Aires, y analizaron qué puede hacer el gobierno argentino para ayudar a fortalecer la unión aduanera en los 6 meses que le quedan de mandato.

"Estoy convencido: en la agenda del Mercosur deben figurar temas políticos. Necesitamos de instituciones comunes, pero consistentes", dijo Lula tras el encuentro, celebrado en su primer viaje al exterior desde que fue electo el 27 de octubre.

El bloque atraviesa uno de los peores momentos desde su historia debido a las dificultades económicas de sus miembros, en especial de Argentina, que sufre una severa crisis.

"Alimento el sueño de que el Mercosur pueda tener su propio Parlamento, electo por voto popular, lo que comprometerá más a la sociedad de cada país con el proceso de integración", agregó Lula, del izquierdista Partido de los Trabajadores.

SALUDOS. Lula leyó un discurso de 15 minutos en los jardines de la residencia de Olivos y, al final de la ceremonia, recibió los saludos de Carlos Reutemann, gobernador de la central provincia de Santa Fe y preferido de Duhalde para sucederlo, pese a que ha dicho que no será candidato.

Para Duhalde, la vista de Lula a Argentina constituye una fuerte indicación de las prioridades del mandatario electo brasileño.

La visita "marca claramente que el proyecto estratégico del Mercosur está en su pensamiento (de Lula), así como está en todos los partidos políticos de la República Argentina", dijo Duhalde.

El portavoz de Lula, André Singer, dijo que el presidente electo reiteró a Duhalde que su país reforzará la necesidad de apoyar a Argentina. La semana próxima Lula vajará a Washington, donde se reunirá con el presidente George W. Bush.

En Olivos, y paralelamente a la reunión de Lula y Duhalde, parte de la comitiva del presidente electo brasileño se entrevistó con el ministro de Economía de Argentina, Roberto Lavagna, y el canciller Carlos Ruckauf.

Del lado brasileño asistieron el embajador en Argentina, José Botafogo Goncalves; el senador electo del PT Aloizio Mercadante, quien es secretario de relaciones internacionales del partido, y el secretario general del PT, Luiz Dulci.

Lula, quien asumirá el 1º de enero en remplazo del saliente presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, llegó a la residencia presidencial de Olivos con su esposa, Marisa, quien mantuvo un encuentro con la primera dama de Argentina, Hilda Duhalde. REUTERS