Uruguay llegó al lugar que le exige su gloriosa historia

Supieron cumplir

Los celestes reaccionaron a tiempo y en el peor momento, ante un rival que realzó el significado de su trabajoso logro.

4- FESTEJO 1ER GOL-  PEREZ

 

¡GRACIAS! Darío Rodríguez festeja hincado el primer gol uruguayo, mientras Magallanes le cae arriba al autor de la conquista, Darío Silva

JORGE SAVIA

Hoy, ahora, no parece ser el momento más justo ni más lógico para posar minuciosamente la lupa del análisis sobre las huellas de las últimas pisadas celestes en el largo camino que llevó a Uruguay a estar --después de 12 años de ostracismo-- en un Campeonato del Mundo.

Se le ganó a Australia por un gol más de la diferencia que se precisaba para alcanzar el objetivo de llegar a Japón y Corea, y al mismo tiempo enterrar los fantasmas de anteriores frustraciones, y eso es lo que cuenta, lo único que importa. Mañana mismo, incluso, será cuestión de empezar a bucear en el futuro. Pero más que esos 90' que en su mayor parte fueron de tensión y hasta de sufrimiento que de gozo, el presente es la alegría de la gente que llenó el Centenario con sus ganas, con su fe, con su apoyo, y hasta su escondida y visceral necesidad de disfrutar de una victoria que llevara al fútbol uruguayo a mirarse otra vez sin verguenza al espejo de su historia, es la entrega enorme y sin límites que --por encima de aquellas limitaciones propias que hicieron que la tarea fuera más azarosa y dificultosa--ofrendaron los jugadores y, por qué no, es también la agitada orientación que a un costado de la cancha estuvo a cargo de Víctor Púa, que --a despecho de cualquier disquisición de si los hizo en el instante preciso o con alguna demora-- realizó cambios como ese del ingreso del "Chengue" Morales cuando hacía un rato largo del segundo tiempo que parecía que a Uruguay se le venía la noche, y que a la postre fue tan trascendente y gravitante para el resultado final, como lo pueden haber sido la monumental gestión de Pablo García en la tarea de recuperación de la pelota y las desequilibrantes ispiraciones individuales --por ejemplo: las de los últimos y decisivos goles-- del "Chino" Recoba.

Tampoco interesa en este instante, que Australia hizo muchísimo más por la riña que lo que sugiere la amplitud final del score y que, incluso, de no haber sido por un par de atajadas prodigiosas --una en cada tiempo-- que hizo Carini ante sendos cabezazos de Kewell y de Skoko, como también de varias situaciones claras de gol que los visitantes malograron casi increíblemente, prácticamente sobre la raya del arco local, fundamentalmente en los 20' iniciales del complemento, cuando Uruguay había perdido ritmo, cohesión y dominio tanto de la cancha como de la pelota, la historia hasta bien pudo ser otra. A la luz de eso mismo es que el triunfo, y por ende la clasificación, se vuelven más disfrutables y meritorios. No fue fácil. Al contrario. Fue duro. Riesgoso. Porque los australianos salieron a atacar de entrada, dejando sentada la intimidatoria sensación de que no habían venido de tan lejos nada más que a meterse en el fondo como forma de defender el gol de ventaja que habían sacado agónicamente en Melbourne, y luego se vieron desestabilizados por los desbordes que abrieron Regueiro y Darío Silva --más alguna subida de Tais-- sobre las puntas, las maniobras cada vez más individuales de Recoba y los pases de Guigou como el que permitió que el olimareño pusiera en ganancia a Uruguay antes de llegar al primer cuarto de hora, pero poco a poco, de la mano de Kewell y Lazaridis, como del orden y la personalidad del conjunto, consiguió ir trabando la ofensiva rival y --especialmente por el flanco derecho de la retaguardia celeste-- contragolpear en forma profunda.

Por eso, entonces, haber alcanzado el objetivo, postergado durante 12 años, incluso con equipos y jugadores de aparentemente mayor jerarquía individual y nombradía que muchos de los de ahora, es lo único que importa. Por la manera que se logró, incluso. Porque cuando Púa llamó al "Chengue" a todo el mundo le quedó claro que ese partido que teóricamente era imposible de ganar (con el margen necesario para clasificar) por arriba, a esa altura solo se podía sacar adelante con ese recurso: a la heroica. Y en el peor momento, Uruguay supo reaccionar de ese modo. Con un centro-balazo de Recoba. Con el cabezazo oportuno y furibundo con que el "Chengue" metió el segundo. Y también con el aguante "a como dé lugar", con estrategia y corazón, que vino después con la entrada de Sorondo por Darío Silva y cinco zagueros en el fondo.

Así, dejando todo, los celestes supieron cumplir. Con su pueblo. Con el mandato y hasta el reclamo de su historia. Uruguay no está en la gloria. Está entre los 32 mejores del mundo. Por su inigualable pasado, es lo menos que le corresponde.


Expreso a Oriente

Los tres goles hicieron pedazos las calculadoras y echaron a volar los sueños de todos los uruguayos, para depositarlos con dulzura infinita en la tierra del sol naciente

ALVARO LEVRERO

"Para Uruguay, gol del 'Chengazo' Morales", se oyó por los altoparlantes del "Centenario" luego que el gigantesco moreno sentenció, con su segundo gol en 25 minutos de presencia en la cancha, nada más ni nada menos que la clasificación de Uruguay para el Mundial de Corea y Japón 2002.

La habitual profesionalidad sin mácula del locutor, se había permitido un lujito, una pequeña licencia. Es que había llegado el fin de un maratónico camino que los nuestros recorrieron sobre un mar de espinas, lacerándose a cada paso y llegando a un final de sangre, sudor y lágrimas, bien a la uruguaya, para ocupar la última plaza que quedaba libre para el Mundial. Porque Uruguay se prendió a la gran justa corriéndola de atrás, colgado del estribo, como se solía viajar en aquellos viejos ómnibus de plataforma, cuando la gente se subía aún después que el conductor ya había arrancado.

Se trepó a la Copa igual que Recoba y el "Tornado" Alonso lo hicieron sobre el horizontal de la Colombes, abrazados y ofrendándole el triunfo a la gente. Y después el del Atlético de Madrid se llevó por cuenta propia al "Chino" sobre sus hombros, para completar una vuelta olímpica improvisada y terminar abrazados, saltando y besando la celeste, junto al héroe de la tarde, Richard Morales, sobre el alambrado de la Platea América.

Esta vez los inventores de la inmensa bandera celeste con el 1950 en el centro, resolvieron el desafío a la inventiva de la forma más sencilla y gráfica. Le estamparon "Orientales la patria o la tumba" y eso ayer equivalía futbolísticamente al todo o nada. Entonces, con tanto en juego como para mover a semejante título, resultó lógico que el festejo no fuera organizado, nunca podía haberlo sido porque la locura fue desenfrenada y el desahogo no tuvo límites. Por eso algunos optaron por dar la vuelta, otros se fueron gritando hacia la Amsterdam o enfilaron para la Colombes. Darío Silva había pasado los últimos minutos --fue sustituido-- parado delante del banco de suplentes de Uruguay y revoleando sus brazos de abajo hacia arriba para animar al aliento de la gente. Después, en el placard electrónico de la Colombes, un "Gracias Paco" se acordó de Franciso Casal.

En las tribunas nadie se movió, ni el padre, ni el hijo, ni los sobrinos, ni los novios, ni la barra de amigos, nadie. Todos vieron primero como a Víctor Púa se lo tragó la boca del túnel, como Fabián Carini tiró casi toda su indumentaria a la Platea América, como el "Chengue" Morales se quedó casi desnudo y tantas cosas más con las que habían soñado durante mucho tiempo.

Y entonces se miraron, se leyeron el pensamiento y abriendo los ojos muy grandes, casi como el dos de oro, gritaron al unísono: "¡no puede ser, no puede ser, se acabaron las matemáticas, estamos adentro, clasificamos, clasificamos!". Pensaron que ahora ya no va más el "¿cómo va Colombia?" o el ¡paaah, ahora hay que hacer dos y esperar que..."

Las calculadoras volaron junto a los rompecabezas de otros resultados. El pasaje en el expreso a oriente lo pagaron esos tres goles inolvidables. La estocada maquiavélica de Darío Silva, la cabeza mágica y el toquesito sutil del "Chengue".

Y los sueños también volaron. Desde marzo de 2000 atravesaron mares y continentes, dieron mil vueltas, supieron de noches de tormenta y de días luminosos, aterrizaron de golpe para volver a ser remontados como las cometas...y ayer se despositaron suavemente, con una dulzura infinita y grandiosa, en la tierra del sol naciente.

De los 3.100.000, paga 1.600.000 dólares

AUF jugó segura

La Asociación Uruguaya de Fútbol pagará U$S 1.600.000 de los U$S 3.100.000 que fueron estipulados como premios de clasificación para los jugadores y el cuerpo técnico, sin que eso signifique no cumplir lo acordado.

En efecto, aunque la AUF sacará de sus arcas un poquito más de la mitad del dinero prometido, los protagonistas de la clasificación a la Copa del Mundo recibirán todo el monto.

La clave del negocio está dada por el seguro que contrató la AUF, por el cual pagó 500.000 dólares y a cambio de recibir 2.000.000 en la misma moneda estadounidense para el caso de obtener la clasificación.

Con ese contrato, los U$S 2.500.000 de los futbolistas y los 600.000 de los entrenadores (350.000 de Púa y 250.000 de Gesto) le significarán a la AUF nada más que U$S 1.600.000.


Los celestes cumplieron con el mandato que le exigen sus antecedentes

Salvó Historia

Después de estar ausente en los últimos dos, Uruguay accedió a jugar un Mundial por décima vez. Fue campeón en 1930 y 1950 y cuarto en 1954 y 1970. Disputó 37 partidos.

EDUARDO CHORBADJIAN

Uruguay jugará un Mundial de fútbol por décima vez. Tras faltar a las últimas dos Copas del Mundo, ayer la selección volvió a acceder al principal campeonato de selecciones --que se disputará del 31/5 al 30/6 en Corea del Sur y Japón--, como lo exige y lo marca su historia.

Los celestes fueron campeones en 1930 y 1950 y cuartos en 1954 y 1970. Sumaron 37 partidos, de los cuales ganaron 15, empataron 8 y perdieron 14. Convirtieron 61 goles y recibieron 52. Su máximo goleador fue Oscar Omar Míguez, con ocho conquistas, y el que lo defendió en más Mundiales fue Pedro Rocha, que jugó cuatro.

El primer partido de Uruguay fue el 18/7/1930, cuando se inauguró el Estadio Centenario, por 1 a 0, sobre Perú, y el último el 25/6/1990 ante Italia, que le ganó 2 a 0 en Roma. Pero después del primer partido y antes del último, pasaron muchas cosas y se vivieron varios momentos de gloria.

Tras la victoria ante Perú, el equipo uruguayo se impuso 4 a 0 a Rumania. Ya en semifinales, superó claramente a Yugoslavia por 6 a 1 y en la final doblegó a Argentina por 4 a 2.

El equipo uruguayo no participó de los Mundiales de 1934 y 1938, pero en 1950 volvió a jugar y logró la mayor hazaña de la historia del fútbol, al superar a Brasil como visitante 2 a 1, en la final. Antes le ganó 8 a 0 a Bolivia en la primera etapa y empató 2 a 2 con España y le ganó 3 a 2 a Suecia en la rueda final.

En 1954 superó la primera fase tras vencer a Checoslovaquia (2-0) y Escocia (7-0), le ganó 4 a 2 a Inglaterra en cuartos de final, pero cayó por el mismo marcador ante Hungría, en alargue, tras un partido memorable.

Tras no acceder al Mundial de 1958, los celestes volvieron en 1962, con una actuación muy pobre, ya que no pasaron la primera fase. Superaron 2 a 1 a Colombia, pero a continuación cayeron con Yugoslavia (3-1) y URSS (2-1).

En 1966 empató 0 a 0 con el local, Inglaterra, en el partido inaugural y luego superó a Francia 2 a 1 e igualó con México 0 a 0. Esta buena actuación en la primera fase fue opacada por una dura derrota en cuartos de final, por 4 a 0, ante la República Federal Alemana (RFA).

En 1970 se logró la última actuación destacada. En la primera fase se le ganó a Israel 2-0, luego se empató con Italia 0-0 y perdió con Suecia 1-0. En cuartos de final, le ganó 1-0 a la URSS en alargue y en semifinales perdió con Brasil 3-1, por lo que debió ir al partido por el tercer puesto, en el que cayó 1 a 0 ante la RFA.

En el Mundial de Alemania 1974 se perdió con Holanda (2-0), se empató con Bulgaria (1-1) y se perdió con Suecia (3-0), por lo que no se superó la primera fase.

Uruguay volvió a jugar recién en 1986, oportunidad en la que empató 1 a 1 con la RFA, luego sufrió la peor derrota de su historia, ante Dinamarca 6 a 1 y clasificó como uno de los mejores terceros luego de igualar 0 a 0 con Escocia. En los octavos de final fue eliminado por Argentina, que le ganó 1 a 0.

La última participación fue en Italia 1990: se empató 0 a 0 con España, se cayó 3 a 1 con Bélgica y se le ganó a Corea del Sur 1 a 0. El último gol lo marcó Daniel Fonseca en el último minuto de ese partido, porque en el siguiente, se cayó frente a los locales 2 a 0.


CAMINO AL MUNDIAL .El hasta ayer entrenador de la selección reveló cómo, por qué y cuando sacó a De los Santos. Sostuvo que "solo nos podían hacer un gol por alto"

TECNICO VICTOR PUA CELESTE

"No depende de mí"

El futuro en la selección pasa porque "me confirmen lo que me ofrecieron hace un tiempo"

JOSE MARIA BELLO

El domingo, una vez terminado el partido, y cuando estaba finalizando el contacto con el periodismo, Víctor Púa hizo saber que por unos días proyectaba mantenerse al margen, porque iba a descansar yéndose afuera de la capital, pero ayer cambió la situación ya que --debido a la intensa actividad que desplegó durante los casi 30 días que estuvo concentrado-- no recordaba que sus hijos estaban en pleno período de exámenes. Fue por ello, entonces, que ayer dialogó con los medios y, la verdad, que estuvo bastante requerido. En su casa del barrio Malvín en determinado momento hubo cola en la puerta esperando turno para que el técnico atendiera.

Mucho más distendido que luego del partido, pero siempre cauteloso a la hora de hacer declaraciones, Púa atendió uno a uno los requerimientos de los medios. La charla no fue continua ya que el teléfono sonaba a cada instante, recibiendo llamadas no sólo locales sino también internacionales. Desde España, Ecuador, Argentina y México lo convocaban para que saliera al aire en diferentes programas y a ninguno le dijo que no.

--El domingo debe haber sido uno de los días más felices de tu vida.

--Si lo medimos por lo que se ha logrado después de 12 años de no estar en un Mundial y por todo lo que primero sufrió la gente y luego festejó, sin duda que fue un triunfo importante.

--Llamó la atención la seguridad que tenías en lo previo, incluso antes del partido en Melbourne, cuando sostenías que empatando, e incluso perdiendo por un gol, estabas convencido que acá lo daban vuelta. ¿En qué se basaba ese optimismo, cuando Uruguay había exhibido en los últimos partidos una falta de gol preocupante?

--Uruguay en los partidos clave siempre había respondido, y este vaya si lo era; además, siempre se creaban las chances y lo que faltaba, quizá, era un poquito de suerte. Veía al equipo que venía en alza, venía jugando bien, seguro atrás y en el medio. Luego el convertir o no, es un problema de estar con la pólvora seca o mojada.

--¿Cuándo decidiste que no jugaba Gonzalo De los Santos?

--Una vez que terminó el partido en Australia, esa idea comenzó a dar vueltas en nuestra cabeza. Después, cuando llegamos a Montevideo seguimos pensando lo mismo, pero no pudimos entrenarlo ya que algunos días llovió y esas cosas (para los de afuera la verdad de la película es que no lo practicó para que se mantuviera en secreto) y el sábado a la nochecita tomamos la resolución.

--¿Cuándo se lo comunicaste al jugador?

--¿A qué viene esa pregunta?

--Porque se ha dicho que se había enterado recién cuando iban para el estadio, en el ómnibus.

--Eso no es verdad y el que dude que se lo pregunte a Gonzalo. El domingo, a eso de las 10 de la mañana, nos juntamos y se lo comuniqué; estos son esos cambios que no te gustan hacer, porque él había jugado muy bien allá, pero el partido lo ameritaba y debo destacar que más allá que a todos los jugadores les gusta estar, Gonzalo lo tomó con hidalguía, con naturalidad y apoyando, y es algo que debo agradecérselo.

--¿En algún momento pensaste que nos podían hacer un gol?

--Dudé un poco y fue cuando puse a De los Santos y Sorondo, porque veía que ellos solamente nos podían hacer un gol por alto; luego siempre estuve confiado que íbamos a clasificar.

--¿Por qué Regueiro?

--Porque a un equipo fuerte, alto y que jugaba con dos líneas de cuatro, la manera que se le podía entrar era por los costados y allí Mario (Regueiro) nos abrió bastante los caminos.

--¿Y ahora qué?

--Ahora a descansar y cuando vuelva Figueredo nos vamos a reunir para definir la situación.

--¿Qué tiene que pasar para que Púa siga dirigiendo a la selección?

--Que me confirme lo que hace un tiempo me ofrecieron, la renovación automática a la que le respondí que mi deseo era esperar y hablar después de lograr la clasificación.

--¿Por donde pasa la definición? ¿Por la parte económica o por otro lado?

--Puede haber algo de eso, pero lo más importante es ponernos de acuerdo en un proyecto hasta el Mundial.

--Estás dentro de un proceso que no iniciaste.

--Por allí pasa la cosa; reitero hay que armar un proyecto de ahora al Mundial.

--De 1 a 10,¿ en cuánto se sitúa la posibilidad de que te quedes?

--No hay ningún impedimento, solamente nos tenemos que sentar a hablar, nada más.

--¿Las relaciones con la gente de Tenfield se han desgastado?

--Para nada, al contrario. Con "Paco" soy amigo desde hace 30 años y con Gutiérrez y Francescoli jugamos en contra, nos conocemos de toda la vida, y tengo una excelente relación.

--¿En algún momento notaste que tuviste menos apoyo que Passarella?

--Eso es bueno aclararlo, porque tanto "Paco" como Enzo y el "Tano", siempre estuvieron con nosotros. Recuerdo que después del primer partido que dirigí y perdí contra Paraguay, a la otra mañana me llamó Casal por teléfono y me dijo que "más que nunca vas a tener mi apoyo, aviones, hoteles lo que necesites. El mismo apoyo que tuvo Daniel (Passarella) y más, vas a tener vos, no sólo porque sos buen técnico, sino porque sos amigo mío"; por eso tengo que estarle muy agradecido.

--¿Alguna vez te quiso poner algún jugador

--Algunos quieren demostrar lo indemostrable; "Paco" jamás se metió en la integración del equipo. Al contrario, por la amistad que tenemos y porque es un tipo ubicado, nunca me ha dicho nada; incluso, jamás me preguntó siquiera cual iba a ser la integración del equipo. En este período vino para el partido ante Brasil y el sábado que fue a almorzar con nosotros, Un reconocimiento para él, para Tenfield y para la Auf, que juntos han logrado que nos sintamos cómodos y bien respaldados.

--Manejemos la hipótesis de que Púa va a ser el técnico en el Mundial, ¿qué cosas habrá que cambiarle a este equipo?

--Siempre hay que mejorar, tenemos una buena base, pero debemos afilar la precisión en velocidad para poder sorprender y llegar al gol.

--¿No hubiera sido conveniente que fueras a presenciar el sorteo en Corea para ir viendo los lugares de concentración y las canchas de entrenamiento?

--No es imprescindible, porque todavía hay tiempo; además, va a ir Osvaldo Giménez que está en el tema.

--¿Te invitaron para ir?

--No, pero lo importante es que esté Uruguay, no yo.

--La última, y perdón por lo reiterativo, pero después de lo relacionado con la clasificación de Uruguay, es el tema del momento. ¿Creés que es muy difícil tu continuidad al frente de la selección?

--Creo que no va a haber problema, pero no depende de mí.

"Si lo dicen despectivamente..."

--Cuando el periodismo, o incluso la gente, pedía que citaras a fulano o mengano ¿te daba bronca?

--No... Son las reglas de juego, a veces en un partido hacés los tres cambios y te piden el cuarto; esto es lo mismo que si vos traés a un jugador y te piden a otro y el acierto o el error estará relacionado en cuál sea el resultado final.

--¿Que tenés que decir de la gente?

--De la gente no, a la gente le tengo que decir gracias porque se portaron de novela.

--¿Sos un tipo de suerte?

--No se qué es tener suerte.

--Y, por ejemplo, haber puesto al "Chengue" Morales y que haya hecho dos goles.

--Pensando de esa manera, si no hubiera hecho los goles hubiera tenido mala suerte, y si fuera como vos decís, no es mala cosa tener suerte; ahora, si lo dicen despectivamente, creo que hay algo más que suerte.

--¿Pensaste en algún momento que se podía clasificar en forma directa?

--Sí, tuvimos la posibilidad pero se nos complicó después del partido ante Venezuela.

--¿Es mucha la presión que se siente estando al frente de la selección, jugando algo tan importante como lo es una Eliminatoria?

--No es para tanto, lo que sucede es que a veces uno siente que no se es totalmente objetivo, pero después todo es normal.

--¿Qué papel jugó la familia en todo esto?

--Es el sostén, mi señora que tuvo que hacer de padre y de madre, mis hijos que pese a que tienen buenos amigos siempre escuchan algún comentario por lo que tienen que hacerse fuertes. Sin ellos nada se puede lograr, tienen la gran virtud de hacer lo posible para que yo pueda pensar exclusivamente en el fútbol y eso, sin duda, trae aparejado que los problemas que haya los tienen que resolver.


Lo merecía la afición

ESCRIBE JORGE DA SILVEIRA

Uruguay logró finalmente su clasificación para el Mundial 2002 tras vencer a Australia 3 a 0, en el partido revancha del que ganó el Campeón de Oceanía en Melbourne 1 a 0.

Luego de un partido cambiante, en el que ya se puso en ventaja a los 14, no mantuvo el nivel de juego ni el dominio del trámite y recién afianzó el triunfo y la clasificación cuando ingresó R. Morales a los 20 del complemento, en el peor momento para los celestes. Dos goles del recién ingresado permitieron un festejo alborozado de una afición que apoyó como ninguna otra a su selección en los diez partidos de local de la Eliminatoria.

Púa hizo dos cambios que le dieron muy buen resultado. Puso a Regueiro como carrilero por izquierda, lo que brindó salida rápida, clara y desbordes por ese costado.

Sacó del equipo a De los Santos, para que jugara como volante central Guigou, antes lateral volante izquierdo. Este fue el eje ofensivo. El estratega del equipo, distribuyó muy bien la pelota y colocó pases profundos como el que permitió el tanto de apertura por D. Silva con precisa culminación, luego de cubrir muy bien el balón con su cuerpo. Una vez más, al no verse limitado en el espacio, P. García volvió a ser la gran figura en defensa y salida, con su tradicional empuje. Recoba comenzó bien, creó peligro, para diluirse en el cuarto de hora final del primer tiempo.

Lo que la faltó a Uruguay fue aporte de los puntas, en especial por Magallanes, quien tuvo un flojo desempeño. Tal vez pudo ser diferente la historia si Morales hubiera ingresado como titular, como en algún momento lo pensó Púa. Silva no comenzó bien, pero luego del tanto se afianzó.

Luego del gol de apertura no aprovechó el desconcierto de Australia, dejó de presionar y permitió la reacción, a punto tal que por dos veces Kewell pudo igualar. De cualquier forma hubo otras dos ocasiones de aumentar por jugada de Regueiro por izquierda y otra que se perdio Magallanes al rematar de derecha cuando salía el arquero Schwarzer luego de gran pase atrás de Silva.

En el complemento, salvo una diagonal muy buena de Guigou, no hubo peligro para Australia que pasó a dominar terreno, juego y pelota e hizo pensar mucho más en la posibilidad del empate que en un nuevo tanto celeste.

En el peor momento del encuentro, a los 20, Púa dio ingreso a R. Morales por Magallanes, cambio bien hecho. Cinco minutos después, un tiro libre de Recoba desde la izquierda fue peinado por Morales en gran anticipo ofensivo para anotar el segundo tanto. Con esa conquista se descartó la posibilidad de un alargue, clasificaba Uruguay, y se exponía a quedar eliminado si Australia conseguía un gol.

Púa puso a De los Santos primero y a Sorondo para reforzar la defensa y mejorar el juego aéreo que había generado peligro para Carini. Hubo situaciones de angustia para los dueños de casa hasta que sobre el final R. Morales y Recoba hicieron una linda maniobra, que culminó el primero tras gran pase del segundo, para poner el 3 a 0 que aseguró la clasificación.

Con la angustia y el suspenso que parecen ser ya un designio para su fútbol, Uruguay logró su plaza entre los 32 de Japón y Corea tras una labor irregular en el evento, de un partido a otro y dentro de un mismo cotejo. Deberá mejorar mucho desde aquí al Mundial para hacer buen papel, realizar un fútbol más competitivo y adquirir la madurez que le falta.


CAMINO AL MUNDIAL .Eugenio Figueredo, Juan Pedro Damiani y Osvaldo Giménez estarán en el sorteo del próximo sábado . Buscarán concentración para los celestes.

Uruguay puede quedar en el fondo de la bolsa

El sorteo será visto por más de mil millones de personas en 135 países y habrá 1.700 policías custodiando Busán

COREA DEL SUR | ANSA

Francia, actual campeón, Japón y Corea del Sur (organizadores) y Brasil, Argentina, Italia y Alemania serán cabezas de serie para el sorteo del Mundial 2002 del sábado en Busán.

Lo revelaron fuentes de la FIFA, que pusieron en duda sin embargo los nombres de la otra selección que completará el lote de los equipos cabezas de serie.

Tradicionalmente, esa distinción la reciben los campeones mundiales, pero Inglaterra y Uruguay, los otros dos ganadores de Copas, podrían perder esa condición a manos de España, según las fuentes consultadas.

La FIFA no tomará en cuenta para ello su ranking mensual de selecciones que, entre otras cosas, ubica a Colombia en el quinto lugar, aunque esa formación ni siquiera logró clasificarse al Mundial.

Las ocho cabezas de serie ocuparán la Urna A, mientras que en la Urna B, siguiendo el criterio de Francia '98, irán las cinco selecciones africanas (Sudáfrica, Camerún, Nigeria, Senegal y Túnez) más las tres de la ex Concacaf (Costa Rica, Estados Unidos y México).

En la Urna C deberían ubicarse ocho de las quince selecciones europeas, aquí sí respetando el ranking FIFA y en la Urna D estarán tres selecciones sudamericanas (Ecuador, Paraguay y Uruguay), dos asiáticas (China y Arabia) y las tres europeas de peor ranking.

El Mundial se jugará del 31 de mayo al 30 de junio, con 32 selecciones que serán divididas en ocho grupos de cuatro equipos cada una.

HOY. Las reuniones comenzarán en la presente jornada, a las 14.00 horas locales (en la madrugada del miércoles en Latinoamérica), tras lo cual está prevista una conferencia de prensa. El jueves se reunirán las Comisiones de Finanzas y de Seguridad y Fair Play de la FIFA y el viernes el Comité Ejecutivo encabezado por Joseph Blatter.

El secretario general de la FIFA, Michel Zen-Ruffinen, que adelantó su viaje para preparar las reuniones, afirmó que el Mundial 2002 "será el más seguro" en la historia del fútbol, en respuesta a los temores suscitados tras los ataques terroristas del 11 de setiembre en Estados Unidos.

Unos 1.700 policías vigilarán el sorteo del sábado 1º de diciembre, que se celebrará a partir de las 19.00 horas locales en el Centro de Exhibiciones y Convenciones de Busán (BEXCO), la segunda mayor ciudad de Corea del Sur, después de Seúl.

La policía informó que los 1.700 policías serán movilizados en los alrededores y dentro de ese escenario, en hoteles vecinos y en los aeropuertos de Incheon y Gimpo, mientras que los personajes VIP serán escoltados individualmente.

El sorteo será visto por más de mil millones de personas en 135 países, según estimaciones oficiales.

Holanda, ausencia que pocos esperaban

MADRID .Holanda, cuarta clasificada en Francia'98, se quedó sin cupo en el primer Mundial asiático y será la gran ausente en Corea-Japón 2002.

Por primera vez desde 1986,Holanda no estará presente en un torneo importante, pese a contar con una de las mejores generaciones de futbolistas de su historia.

Tiene a Patrick Kluivert (Barcelona), a Jimmy Floyd Hasselbaink (Chelsea) y a Ruud van Nistelrooy (Manchester United), tres de los mejores atacantes del mundo, pero fue incapaz, siquiera, de jugar el repechaje europeo.

Quedó tercera del Grupo 2 de la UEFA, tras Portugal e Irlanda y su clasificación no fue producto de la mala suerte, porque el conjunto de Louis van Gaal fue incapaz de ganar ninguno de los cuatro partidos que jugó contra sus rivales directos (dos empates y dos derrotas).

Van Gaal, que se hizo cargo de la selección tras la dimisión de Frank Rijkaard, tras caer en las semifinales de la Eurocopa ante Italia, no logró enderezar el rumbo de un equipo con demasiadas figuras y su futuro como técnico "naranja" parece tener fecha de caducidad.

Holanda añorará tener algún representante en el sorteo del próximo sábado, precisamente en el Mundial en el que habrá más selecciones europeas (15) que en ningún otro. EFE