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| INFORME. Pereyra abrió el Congreso con un duro discurso contra los cuatro gobiernos postdictatoriales |
El PIT-CNT inició anoche su séptimo congreso con duras críticas al gobierno, exigencias a la oposición para interpelar al ministro de Trabajo y Seguridad Social, Alvaro Alonso; llamados a la formación de un "gran frente" contra el gobierno y advertencias sobre la vigencia del movimiento sindical como herramienta de los reclamos populares.
Con la ausencia del presidente honorario del PIT-CNT, José D'Elía, quien no pudo asistir por un problema de salud, el congreso se inició en el gimnasio del Platense con la presencia de más del 80% de los delegados sindicales en el mismo y de representantes de centrales internaciones de trabajadores.
También se destacó la presencia de varios legisladores del Frente Amplio en carácter de invitados, como los diputados Juan José Bentancor, Nora Castro y Víctor Rossi.
Anoche al cierre de esta edición el congreso se aprestaba a votar la postergación de la elección de la nueva dirección del PIT-CNT, lo que se realizaría dentro de quince días. La razón de esta postergación es que este tema no distraiga la atención de las discusiones de fondo que se debe la central sindical, en un congreso que fue calificado como "trascedental", explicaron fuentes sindicales a El País.
El dirigente Eduardo Pereyra abrió entonces el congreso con un mensaje de la dirección del PIT-CNT, en el que reivindicó el papel de la central obrera en la lucha contra la dictadura, e indicó que "aquellos que dimos tanto, somos objeto de la persecución y la represión. Hoy los sindicatos estamos proscriptos. Despidos después de cada paro, ausencia de negociación colectiva, no se convoca a los consejos de salario y nos preocupa el peligroso posicionamiento del sistema político hacia la fuerza laboral. Exigimos hoy la inmediata interpelación al ministro de Trabajo, subrayó.
Habló del récord histórico del desempleo, cierre de fábricas permanente, "lo que refleja la crisis producto de esta política económica llevada adelante por Sanguinetti, Lacalle, Batlle, continuadores de las políticas que se aplicaron durante la dictadura. Estos lacayos del imperialismo han pretendido y pretenden arrasar con el país, vender nuestro patrimonio, supeditándonos por completo al sistema financiero", advirtió.
Pereyra dijo que "asumiendo nuestros déficit y problemas, nos encontramos los trabajadores, con una actitud patriótica en defensa del país, en defensa de la enseñanza, en defensa de la seguridad social".
Advirtió que "hay quienes han pretendido y pretenden barrernos tratando de fomentar la idea de que nuestra central ya fue, de que tenemos una actitud corporativa a la que algunos se suben. Pero nuestro pueblo trabajador contesta que estamos vivos. Señores no nos mataron, ni nos van a matar. Hemos crecido en sindicatos. Hemos mejorado nuestra imagen ante la opinión pública y salimos a la calle para no abandonarla", enfatizó.
Pereyra llamó a construir "un bloque de pueblo para enfrentar el bloque antipopular. Tenemos muchos déficit, debemos mejorar la herramienta, reafirmar más y más nuestro compromiso, necesitamos ser más y más internacionalista, más y más PIT-CNT, más y más acción conjunta, más y más compromiso. Acá no se salva nadie solo. Unidad para vencer, unidad respetando los matices y las diferencias, unidad en la diversidad, unidad, unidad , unidad", enfatizó.
Posteriormente representantes de jubilados, estudiantes, cooperativas y productores del agro dieron su mensaje, donde el denominador común fue el de la unidad y el de integrar un frente común contra el gobierno.
El dirigente de las cooperativas agrarias Aramis Silva, propuso hacer una marcha desde el campo a la ciudad para "abarrotar el Palacio Legislativo". Advirtió la falta de organización, sosteniendo que "hay que quebrar la bandera política que divide. No estamos organizando nada y estamos dando pequeñas batallas y lo que tenemos que hacer es dar un golpe como en el obelisco", afirmó.
Por su parte dos representantes de la Unión de Trabajadores Desocupados, expresaron que ellos también son parte de la clase obrera. "Somos obreros que hemos perdido nuestra fuente de trabajo", precisaron y dijeron que no es un propósito ser utilizados como pretexto, para que se bajen los salarios. "Pedimos trabajo para todos o subsidio para los desocupados, pedimos al congreso establecer un plan de lucha", puntualizaron , advirtiendo que en Uruguay hay 700 mil personas con problema de trabajo.
Anunciaron la próxima realización de una marcha de los desocupados hasta la Casa de Gobierno, "en la que tiene que participar el movimiento obrero en su conjunto", precisaron.
Entre tanto al dar su saludo al congreso, el representante de Cosl -Orit, --considerada la internacional más importante del mundo-- el paraguayo Víctor Baez, advirtió que actualmente en el mundo se está gestando una nueva internacional y puso como expresiones de ello las recientes protestas en las cumbre de Seattle o Quebec, o la última en la ciudad italiana de Génova. "Es el nacimiento de una nueva internacional para oponerse a la derecha", enfatizó.
Hoy el congreso continuará en horas de la mañana, a partir de las 8 y 30 horas con reuniones de las diferentes comisiones, y a partir de las 16 se realizará la reunión del plenario. El congreso finalizará mañana domingo con un acto a las 20 horas.
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REACCION | Legisladores colorados, blancos y nuevoespacistas consideran que no es lo que necesita el país
Rechazo político al tono de confrontación del PIT-CNT
El diputado del Frente Amplio, el exsindicalista Juan José Bentancor, justificó los cuestionamientos de la central obrera en la crítica coyuntura del país.
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VIGILANCIA. Los sindicalistas no permitieron ayer el ingreso de la prensa al plenario del Congreso que se realizó en la sede del Club Platense |
El discurso con marcado tono de confrontación desplegado por los dirigentes gremiales en la apertura del séptimo Congreso del PIT-CNT generó rechazo de representantes políticos colorados, blancos y nuevoespacistas, mientras fue justificado por el diputado del Encuentro Progresista, Juan José Bentancor, debido a la crisis que atraviesa el país.
El diputado de la Lista 15 del Partido Colorado Jorge Barrera dijo que "en este país existe un respeto irrestricto a la Constitución y a la ley y por lo tanto el estado de derecho está plenamente vigente, por lo que descartamos por infundadas las apreciaciones de que en este país no existe un clima de libertad. Al contrario, si hay algo que existe en Uruguay es la afirmación del estado de derecho y la afirmación de un liberalismo político que respeta la pluralidad de opciones. Lo que dice el movimiento sindical, es una constatación de que existe ese clima de libertad y respeto", precisó.
Barrera opinó que "el tono de confrontación no es lo que los uruguayos tenemos que tener en esos momentos de dificultades. Lo que los uruguayos esperan del gobierno, los dirigentes políticos y los actores sociales, es tratar de buscar puntos de entendimiento para aportar soluciones. Los climas de confrontación no conducen a buscar soluciones. Tenemos que cambiar la confrontación por las soluciones", subrayó.
El diputado de Desafío Nacional --sector al que pertenece el ministro de Trabajo Alvaro Alonso--, Sebastián Da Silva, negó que exista persecución sindical. "Al respecto hay un marco normativo claro, donde se realizan denuncias en la Inspección de Trabajo. En esta administración, en caso de contrataciones se ha llegado inclusive a la aplicación de multas", aclaró.
El legislador blanco dijo que la coyuntura uruguaya no admite la confrontación, sino puntos de encuentro y dialogo".
El diputado del Nuevo Espacio, Pablo Mieres, dijo por su lado que "el movimiento sindical está pasando por un momento de crisis, donde es muy significativa la composición del Congreso, hecho que refleja la brutal crisis del país en el sector industrial".
"El sindicato con más delegados es COFE, después AEBU, la salud, la educación y gremios que antes eran muy fuertes como el Sunca (construcción) o el Untmra (metalúrgicos) y los que representan al trabajador manual, prácticamente han desaparecido", sostuvo.
Mieres opinó que "hay conflictos no resueltos sobre las prácticas sindicales y los discursos radicales no arreglan nada. Lo del PIT-CNT se inscribe en un reclamo de cobrar facturas sin alternativas y por ahí estamos fritos, igual que los paros generales que son un rito, donde ya sabemos que sectores van a parar, que cosas van a funcionar y que cosas no, y después el país sigue adelante como si nada hubiera pasado y esa decisión de parar se convierte en algo intrascendente".
COMPRENSION. Por su parte, el diputado de la Vertiente Artiguista, Juan José Bentancor --ex integrante de la dirección de la central--, dijo que "el discurso tiene un tono que está justificado por las circunstancias muy complicadas que está viendo el país, por la crisis económica que se vive, por la situación de dificultad que atraviesan los trabajadores, con todo lo que tiene que ver con el desempleo, por un lado, con la baja de salario, la falta de negociación colectiva, la falta de respeto de los derechos sindicales. Los que estamos en el Parlamento y específicamente en la Comisión de Legislación del Trabajo, lo estamos viendo en forma cotidiana que eso es así y no se ha logrado una solución de continuidad y el PIT-CNT tenía de alguna forma que expresar esa realidad", explicó.
Sobre la exhortación a interpelar al ministro Alonso, Bentancor dijo que "en este momento no está planteada esa posibilidad", aunque "estamos procesando la información que nos dio en la Comisión de Legislación del Trabajo".
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CONGRESO | Lucha por la renovación de autoridades en la central sindical y acusaciones de falta de democracia interna
PIT-CNT reconoce un déficit de 80.200 firmas por Antel
Admiten que hubo un fracaso del plan de recolección de firmas contra la asociación parcial con empresas privadas.
Las autoridades de la central única de trabajadores PIT-CNT reconocieron la existencia de un déficit de 80.200 firmas en el plan de recolección de adhesiones para oponerse a la asociación de Antel con capitales privados en la explotación de la telefonía celular, lo cual fue visto con preocupación durante la jornada final del séptimo Congreso.
En el marco de un informe brindado por el integrante de la Unión de Trabajadores de Cutcsa (UTC), Eduardo Pereira, sobre la marcha de la campaña de recolección de firmas, se dio cuenta que el gremio de Sutel (empleados de Antel) tuvo la presencia más fuerte con 33.000 firmas, pero, como contrapartida, se mencionó a varios con menores logros que los trazados por el Secretariado, lo que arrojó el desbalance anotado.
Hasta el momento en que se ingresó en la etapa final de presentación de candidaturas para la renovación del Secretariado Ejecutivo --cuando se invitó a los periodistas a retirarse-- se llevaban presentados 41 candidatos pertenecientes a 40 gremios para integrar la nueva dirección. AEBU, el sindicato de empleados bancarios, fue el único que presentó dos postulantes, lo que generó una rechifla generalizada de los asistentes al Congreso, celebrado en el Platense Patín Club.
El aspecto básico de la elección fue la proporcionalidad que se negoció durante los últimos días. La mayoría de los gremios pretendía afiliarse a la tesis de "un gremio, un voto", pero otros gremios influyentes sostenían un pensamiento contrario que es, precisamente, con el que se maneja la actual dirigencia de la central obrera.
RECLAMO DE DEMOCRACIA. El sindicato de trabajadores de la construcción, Sunca, se retiró voluntariamente de la discusión estratégica sobre la futura conducción de la central al detectar el predominio de la idea de mantener el actual sistema de funcionamiento, actitud que en la asamblea de anoche fue respaldada por el sindicato de periodistas, APU.
"El Congreso puede elegir una mesa del tamaño que quiera, pero no es poniendo en ella a todos los miembros del movimiento sindical que se asegura su fortalecimiento ni mayor democracia" en los procedimientos, explicó el representante del Sunca Jorge Mesa, que fue invitado a dar cuenta al Congreso sobre la renuncia de su gremio a la posibilidad de integrar la futura dirección.
El dirigente cuestionó las acciones donde "de los 42 miembros" del Secretariado "participan muy poquitos", lo cual consideró que es "contradecir al Congreso". "El Sunca, para el PIT-CNT está fuera de una mesa representativa de 42 miembros", subrayó Mesa.
Pero aclaró que "ni nos desafiliamos ni dejaremos de participar", tras lo cual el miembro del Sunca reclamó la necesidad de "establecer una auténtica democracia en el movimiento" sindical.
Su discurso fue muy aplaudido por los asistentes. De inmediato, Pereira (UTC) invitó a los periodistas a desalojar el salón.
Poco antes, se escucharon otros cuestionamientos a la actual dirección. Un sindicalista de apellido Soto dijo que en el Congreso se impidió la discusión de las minorías y criticó al Secretariado Ejecutivo por "concertar" con los empresarios porque afirmó que forman parte de "la burguesía". También atacó a la dirección por participar en conversaciones con el Ministerio de Trabajo en el marco de un diálogo social.
"El movimiento obrero debe recuperar la independencia de clase", dijo, y rechazó la estrategia actual porque supone "esconder un intento por controlar al PIT-CNT por parte de la corriente conciliadora".
El Congreso obrero aprobó diversas mociones de crítica al gobierno y de reclamo de investigación de la situación de los desaparecidos. A su vez, se rechazó la actitud de las empresas que cometen acciones de discriminación a distintos niveles, como el acoso sexual, el hostigamiento a los discapacitados, a los obesos y a los homosexuales.
José D'Elía debió escuchar numerosas críticas a la Comisión para la Paz, que él integra.
En la víspera funcionaron las comisiones de candidatos, balance, rol del Estado, políticas sociales y seguridad social, salud laboral, estructura y organización, educación y educación profesional y otra de derechos humanos.
El Congreso aprobó un informe de la comisión de organización, que plantea una fuerte ofensiva publica para incrementar las afiliaciones de los trabajadores a los sindicatos, la organización por ramas de actividad y el trabajo en zonales divididas por barrios para atender las demandas de los desocupados.
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EN SECRETO. Con ánimos caldeados, el PIT-CNT cerró anoche su Congreso y eligió nuevas autoridades |
Batlle reprobó protesta sindical "por tradición"
* El presidente Jorge Batlle cuestionó ayer a la dirigencia sindical por desplegar una "tradición de protesta", que, sin embargo, consideró que no está generalizada "en el colectivo de los trabajadores".
Al llegar a Montevideo desde Perú, donde asistió a la asunción presidencial de Alejandro Toledo, Batlle dijo que "la cúpula" del movimiento sindical comete un "grave error de apreciación" cuando afirma que las privatizaciones afectan los puestos laborales.
Batlle recalcó que "los que pagan la desocupación son los que no son empleados públicos", y señaló que ese factor es "una pequeña cosita que nunca se recuerda". Como ejemplo, indicó que toda la sociedad le paga sus salarios a los empleados de El Espinillar, y agregó que "eso quiere decir que si hay alguna cosa que los empleados públicos tienen certeza es que para ellos la desocupación no existe".
En relación a las condiciones de la reciente subasta de la Terminal de Contenedores, el presidente afirmó que la empresa ganadora tiene obligación de tomar "a gente" hoy vinculada a la Administración de Puertos que puede incorporarse "si ella quiere", o de lo contrario, se buscarán opciones para quienes deseen jubilarse o retirarse. "Algunos quieren y van a trabajar con esta nueva empresa", señaló, "pero en el caso que ellos no quieran y entren otros a trabajar, son uruguayos; no son extranjeros que vienen de Zanzíbar", aclaró. Estos nuevos trabajadores, para Batlle, van a promover una acción "mucho más" competitiva, "y por tanto, en vez de haber menos actividad, va a haber más actividad".
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