Discurso de Guillermo Scheck
Administrador de EL PAIS
En nombre de El País deseo agradecer la presencia
de todos ustedes; muy especialmente en el caso del Dr.
Ricardo Ehrlich y la Ing. María Simón,
así como de las autoridades nacionales y departamentales
que hicieron un lugar en su agenda para concurrir a
este acto inaugural. Es muy grato vivir en un país
donde el arte goza de tan alto poder de convocatoria.
Tenemos también entre nosotros a varias de
las personas a quienes debemos buena parte del mérito
de nuestros museos virtuales. Me refiero a los coleccionistas
y pintores que han cedido sus obras para rescatarlas
de la intimidad de sus hogares y talleres, donde no
pueden contemplarlas amantes del arte que no sean de
su íntima relación, sea cual sea el lugar
donde residan y la hora en que quisieron apreciarlas.
A todos ellos, nuestro más profundo agradecimiento
por acompañarnos en estos proyectos.
Nos complace informar que en reiteradas ocasiones
hubo jornadas en que más de 4.000 personas recorrieron
las salas del MUVA I; nunca fueron menos de 200 los
visitantes de cada día y eso es mucho, no solo
para un museo de arte uruguayo sino para casi cualquiera
en el mundo. Creemos que se ha cumplido con creces nuestro
objetivo de difundir la calidad y cantidad del arte
uruguayo, notoriamente desproporcionado con nuestra
dimensión demográfica.
La vocación de El País por promover
nuestro arte y nuestra cultura no es reciente. Cuando
mudamos nuestros talleres de impresión a la calle
Zelmar Michelini, acá donde estamos había
quedado un enorme sótano ocioso. Los técnicos
propusieron que hiciéramos en este lugar un rentable
estacionamiento; pero la propuesta fue rechazada. Creamos
un Centro de Artes y Letras bajo la conducción
de Carlos Eugenio Scheck y la orientación de
María Luisa Torrens. Fue de ella la iniciativa
de sacar el arte a la calle, instalando en medio de
la Plaza Cagancha la recordada Feria Nacional de Artes
Plásticas, reiterada durante varios años.
Así que cuando en 1997 se nos propuso crear un
Museo Virtual sin otro objetivo que el amor al arte,
la iniciativa tuvo apoyo instantáneo. El MUVA
I quedó inaugurado hace casi 10 años,
bajo la Presidencia del Arquitecto Eduardo Scheck, con
la Dirección de la profesora Alicia Haber y con
el apoyo de nuestro Departamento de Proyectos Digitales
conducido por Guillermo Pérez Rossel.
El tiempo corre muy rápido en Internet; en realidad
discurre tan vertiginosamente que resulta imprescindible
cambiar constantemente para ajustarse a los cambios.
El MUVA I, construido con la tecnología más
difundida hace diez años, todavía luce
magnífico y sigue obteniendo premios y menciones.
Pero había llegado el momento de intentar un
MUVA II, acorde a los tiempos que corren. Esta es la
razón de nuestra convocatoria. Con la misma conducción
que el primero, esta segunda realización tiene
una motivación agregada a las iniciales: quisimos
tributar un homenaje a nuestra querida ciudad de Montevideo
y a su característica más notoria como
lo es la bellísima rambla que todos disfrutamos.
Frontera natural de la creación urbana que es
nuestra ciudad; nuestra rambla es también un
espacio que convoca a los montevideanos a asistir a
la mayor obra de arte de la naturaleza, como lo son
los atardeceres sobre la ciudad.
Le debíamos un reconocimiento a la ciudad y a
los ciudadanos que acogieron las ilusiones de nuestros
fundadores en un lejano 14 de setiembre de 1918, cuando
los diarios se hacían en medio del fragor de
las linotypos. Hoy felizmente el plomo fue erradicado
del proceso informativo y el papel convive con nuevas
tecnologías que han derribado las fronteras del
espacio y del tiempo, para bien del conocimiento.
Con este nuevo Museo Virtual procuramos renovar nuestro
compromiso con la cultura y con el arte; esperamos que
sea de vuestro agrado y del agrado de muchos amantes
del arte en todo el mundo.
MUCHAS GRACIAS.
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